El término Telemedicina viene de la prestación de servicios médicos a distancia. Para ejercerla se emplean tecnologías de la información y las comunicaciones, aunque su desarrollo es reciente, esta rama de la ciencia médica tiene varios años ya de existencia.

Desde el desarrollo de las telecomunicaciones, (emisión de información vía ondas electromagnéticas), a finales del siglo XIX, con la invención del telégrafo, la medicina encontró un camino que pudo explotar, por ejemplo, en situaciones de vida o muerte. Durante la Guerra Civil Estadounidense (1861-1865) se utilizó al telégrafo para intercambiar información con un médico e incluso salvar la vida de los heridos. Con la llegada del teléfono en 1854 la interacción médico-paciente a distancia fue mucho más común.

El concepto de Telemedicina como lo conocemos hoy, fue concebida en 1924, cuando la revista americana Radio News publicó en su portada un aparato con televisión y micrófono que permitía una consulta entre un médico y su paciente.

En 1959 la Universidad de Nebraska creó los primeros dispositivos de telemedicina, siendo aparatos que permitían enviar exámenes neurológicos y radiografías a otros médicos para su interpretación.

Si bien se sabe la radiología fue la primera especialidad en ingresar en su totalidad a la Telemedicina. Con la aparición de internet en 1990 la Telemedicina vislumbró una posibilidad fehaciente de transformar la práctica médica.

Conforme pasaron los años se fueron integrando nuevas prácticas, a la fecha hay quienes acuñan a la tecnología como la mejor aliada de la humanidad.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) brindó a la telemedicina en 2005 el siguiente término: “la presentación de servicios médicos en aquellos lugares donde la distancia sea un factor crítico; servicios que son entregados por profesionales médicos mediante equipos de telecomunicaciones y tecnologías de la información, con el fin de interactuar con el paciente y recabar información de él; con el objetivo de prevenir y curar enfermedades, lesiones, y ofrecer educación continua”.

Fue hasta 2013 en México que se reguló al sector salud en el uso de Telemedicina. A la fecha hemos visto un sin fin de proyectos en países “en vías de desarrollo” buscando mejorar los servicios de salud apoyándose en la tecnología.